jueves, 19 de junio de 2025

CARTAS NOTARIALES ENVIADAS POR LOS ALCALDES: ¿ABUSO DE PODER E INTIMIDACIÓN VECINAL?

Las Cartas Notariales no son más que cartas entregadas con la certificación de un Notario de que la misma ha sido recibida. Esto sirve para un proceso legal en donde se tenga que presentar como prueba de que el destinatario sí había recibido la comunicación y que por tanto no puede aducir que desconocía lo que la misma decía. O sea, tiene un valor de entrega certificada, básicamente. Pero cuando a la misma se le da una connotación de amenaza velada, de sutil intimidación y por el sólo hecho de ser entregada por una notaría debe ser temida, porque supuestamente la verdad y la ley la respaldan, entonces ya estamos hablando de un mal uso de ella y, sobre todo, de un evidente abuso de poder de quien la envía, si, además, es una autoridad en ejercicio que se ha sentido injustamente acusada y responde, indebidamente, con cartas notariales, que a veces, reparte como volantes.

Sucede, que en estos últimos tiempos, cuando los Ciudadanos ya han tomado consciencia de que pueden y deben defender los derechos que les asisten y se manifiestan con reclamos directos a la autoridad de turno y ésta, en lugar de responder con descargos, pruebas fehacientes de que ha actuado correctamente e información relevante que contradiga la denuncia y la acusación directas, lo hace mediante amenazas veladas o sutiles a través de cartas que ampulosamente son entregadas a través de una Notaría, entonces la desconfianza en el proceder de dicha autoridad aumenta, la necesaria interrelación administrado-administrador se interrumpe y la gobernanza pública, se fractura.

Es tan sencillo, cuando se actúa de buena fe, sacar un comunicado explicando que las denuncias se sustentan en pruebas falsas o meros supuestos y, que, si hubiera habido algún error en las acciones públicas realizadas, será corregido de inmediato. Pero cuando, en cambio, se identifica, mediante acciones de inteligencia embozada, a la persona que ha promovido la acción de justo reclamo y se le amenaza directamente, dándole “un plazo perentorio para que retire lo dicho o de lo contrario se atendrá a las consecuencias”, entonces las intenciones son claramente de amedrentar, de asustar a todos aquellos que hubieran apoyado esa correcta Acción Ciudadana. Y eso está mal.

Ahora bien, cuando un alcalde se sirve del aparato municipal, de los funcionarios del área legal a su cargo, para “defenderse de un supuesto ataque personal” se está cometiendo un abuso de autoridad que debería ser denunciado. ¿Es más, si nos atenemos a que la verdadera autoridad dentro de una Municipalidad, es el Concejo Municipal y que todas las obras, partidas presupuestales, proyectos y licitaciones, entre otras, han contado con la aprobación previa de dicho ente de gobierno, VERDADERA PRIMERA AUTORIDAD MUNICIPAL, entonces por qué es que los alcaldes actúan por su cuenta y arman un escándalo personal, usando la capacidad y el tiempo de los funcionarios que, supuestamente, están para servir a la comunidad en general? Habrá excepciones, claro, en que uno que otro alcalde cubra el costo-tiempo de dichas acciones con su dinero personal, pero dudo que sean los más.

Finalmente, si hemos recibido pruebas, si tenemos indicios, si la razón nos asiste y los errores, cuando no, las fechorías se observan a simple vista, entonces, ¿Por qué tenerle miedo a una simple carta notarial, que no significa nada más, repito, que un DOY FE de que aquel al que había que asustar, perdón, quise decir, aquel que ha sido faltoso, ha recibido su amenaza, perdón quise decir, su advertencia? Sí pues, las palabras se nos confunden cuando nos referimos a esas intenciones oficiales/legales que son torcidas desde su nacimiento.

Que hay uno que otro ciudadano faltoso, atrevido e irrespetuoso, por supuesto. Pero esos no reciben cartas notariales, sólo las reciben los que saben decir las cosas y tienen ascendencia sobre algunos más. Peligrosos para la gestión, los llaman. Y A ESOS HAY QUE HACERLOS CALLAR. Y, valgan verdades, es mejor que te envíen una carta notarial con una amenaza y no un motorizado con un arma.

jueves, 12 de junio de 2025

DISCULPE USTED LA PREGUNTA, SEÑOR ALCALDE DE MIRAFLORES, LIMA, PERÚ.

El señor alcalde del distrito de Miraflores, Carlos Canales, debe sentirse bastante incómodo ante la avalancha de críticas a una gestión que ya bordea los dos años y medio de los cuatro oficiales, transcurridos sin pena ni gloria. "Odiadores" e ignorantes en los aspectos técnicos los llama él, a los Ciudadanos que están cansados de sus aberraciones, de sus abusos, dudosas contrataciones, cuando no, estallidos emocionales. Y es que no se pueden conducir los destinos de uno de los distritos más icónicos de la gran Ciudad de Lima, Capital del Perú, en base a ideas pueriles, obsesión por lo moderno y llamativo, huachafo dicen muchos y a berrinches personales, propios de una manifiesta incapacidad de gestión. 

Pareciera que el objetivo del señor alcalde hubiera sido, desde el principio de su administración, la de boicotear el bien ganado posicionamiento del distrito de Miraflores como un referente turístico de primer nivel de la Ciudad capital. Su escasa Visión Urbanística pero dotada de un apreciable presupuesto municipal, han propiciado una serie de errores que están convirtiendo al otrora distrito modelo en un collage de errores, habiendo deteriorado sustancialmente el nivel de calidad de vida de los Miraflorinos y, devaluado ostensiblemente, el valor de las propiedades involucradas.

Su obsesión por realizar obras de infraestructura, sin la planificación requerida, y menos, con la necesaria coordinación previa de ejecución, han convertido a Miraflores en algo así como una Ciudad bombardeada y sin amparo; no hay forma de transitar por el distrito con la fluidez y seguridad vial que siempre tuvo. A ello sumamos la inseguridad ciudadana, que claro, es un mal generalizado que las autoridades nacionales respectivas no han sabido manejar, pero que ameritaban mayor empeño y esfuerzo en controlarla a nivel local. Pero, desde la consentida pésima iluminación de los espacios públicos, que aunque es responsabilidad de la empresa proveedora de la energía eléctrica, es un trabajo de supervisión y fiscalización de la autoridad local, hasta la ausencia de un verdadero y funcional Plan de trabajo integrado entre el Serenazgo y la PNP, ha colocado a las familias Miraflorinas en las manos de la delincuencia.

Pretendidas obras que llamaran la atención y fueran premiadas con el aplauso, han fallado desde su concepción, colapsado en su ejecución y enardecido a la población. Sólo por mencionar las últimas, su bastante costosa nueva avenida Comandante Espinar, ya culminada pero con docena y media de errores por subsanar, es uno de sus más grandes desaciertos. Al respecto, nuestro gran Urbanista Augusto Ortiz de Zevallos hace un risueño, pero lamentablemente cierto, comentario: "SENTARSE EN LAS BANCAS INSTALADAS EN LA AVENIDA COMANDANTE ESPINAR ES PARA INHALAR ESCAPES DE CARROS", habida cuenta que han sido colocadas a borde de vereda y con frente a la pista y remarca, "ES UN PROYECTO INGRATO Y FEO CON GANAS".

Su lealtad político partidaria, antes que su compromiso con su ciudad, lo ha llevado a pintar, indebidamente,  de celeste esa otra gran obra, un Puente Peatonal entre Miraflores y Barranco, que tiene la pretensión de ser el nuevo ícono turístico del litoral limeño. Obra cuya ejecución ha sido un suplicio durante muchos meses para los automovilistas que transitan por la Costa Verde, con demasiadas interrupciones, marchas y contra marchas pero que, contra viento y marea, se está concluyendo, bastante tarde y con dudosa proyección de éxito.

Finalmente, mencionamos el apacible Óvalo Bolognesi, al que con un presupuesto de 5 millones de soles quiere convertirlo en un espectáculo de agua y hologramas, retirando palmeras y vegetación y sumando un espectáculo de chorros de agua y luces de colores; al respecto el mismo Urbanista Augusto Ortiz de Zevallos ha comentado: "LO QUE NOS FALTABA, UNA MIRAFLOWERS CON ESTÉTICA DE CASINO IMITACIÓN LAS VEGAS. A HUACHAFEARNOS, NIVEL YA NO YA".

Ya en el otro lado, en el tema administrativo, la unidad de investigación de el diario El Comercio, ha revisado más de 30 procesos de selección para obras viales adjudicadas a través de licitaciones o adjudicaciones simplificadas entre el 2024 y el 2025 en el distrito de Miraflores, encontrando que dichas empresas, detrás de las obras contratadas, habían sido recién creadas, estaban endeudadas, pero aún así, recibían múltiples contratos. Hechos que tocará revisar al Poder Judicial y determinar si usted tiene o no, responsabilidad en ello, con el correspondiente beneficio económico personal.

En resumen, señor alcalde Canales y, disculpe usted la pregunta, no le importa pasar a la Historia Municipal de Miraflores, como el peor alcalde que ha recibido el honor y la responsabilidad de gestionar su desarrollo?, triste título que está siendo ratificado con sucesivos plantones vecinales, que se siguen produciendo semanalmente, que mediante infantiles medidas, alguien de su leal entorno ha intentado boicotear, como contratar DJ con inmensos equipos de sonido para contrarrestar los gritos de los Miraflorinos manifestantes en las puertas del palacio municipal, o en el siguiente plantón, intentar desnaturalizar, a decir de los propios manifestantes presentes,  la naturaleza y objetivo de dichos plantones, sembrando señoritas con carteles de partidos comunistas que nada tenían que hacer allí y que luego los partidos involucrados han reclamado por el atrevimiento de tomar su nombre para esa pretendida protesta partidaria.

Tiene usted el tiempo suficiente para rectificar su proceder señor alcalde. Se lo debe a los electores que confiaron en usted, pero sobre todo, se lo debe al distrito de Miraflores.

domingo, 11 de mayo de 2025

APUNTES SOBRE EL ECOCIDIO CONTRA EL BOSQUE DE ATE y LA MOLINA

Bajo la advocación de mejorar la Movilidad Urbana de Lima Metropolitana, se están talando cerca de 7,000 árboles maduros, que pertenecen al Bosque de la Separadora Industrial en Ate.

El Ministerio de Transportes ha armado un aparente negociado con empresas españolas a las que les ha concedido la buena pro en la licitación de un anillo vial periférico, que hace dos décadas podría haber sido importante, pero que hoy está totalmente desfasado y que además de arrasar con un maravilloso pulmón metropolitano requiere la expropiación de alrededor de 2,500 predios, ubicados en los alrededores del proyecto y el éxodo de miles de familias y empresas familiares arraigadas, a sabe Dios dónde. 

Se señala de necesidad el proyecto, para mejorar la movilidad urbana de ese sector, entendiéndose que está dirigido a los Ciudadanos que se trasladan internamente entre los 11-12 distritos involucrados, pero el porcentaje de población que se desplaza interdistritalmente es mínimo y, dado que esa super carretera está destinada al transporte particular, el porcentaje de "beneficiados" es ridículo, en comparación con la necesidad de viajes de Ciudadanos que usan el Transporte Público. Se está involucrando, entonces, una inversión millonaria, que bien podría haberse dedicado a mejorar la infraestructura y a adquirir los vehículos dirigidos al Transporte Público.

Lo curioso es que se señala que las empresas ganadoras de esta licitación, no van a poner el dinero, sería entonces, el estado peruano el que tendría que "ayudar" a financiar su construcción, con capitales de terceros, que tendrían que recibir el aval de nuestro presupuesto nacional. Y, en el colmo del abuso, las empresas favorecidas tendrían la potestad de implantar de 1 a 5 peajes para financiar el mantenimiento de esa enorme vía vehicular. O sea, un verdadero regalo económico para los empresarios constructores.

Creo que los habitantes de los distritos involucrados no han tomado real conciencia de lo que este ECOCIDIO significa. Pero este crimen urbano no sólo involucra a los distritos de Ate y La Molina, si no a toda la población Metropolitana, porque una vez que desaparezcan esos miles de árboles, que por expansión y otras gracias, serán miles más, se perderá un importante pulmón natural de Lima Metropolitana, se alterará el micro clima, aumentará la sensación térmica en general, se derribará una barrera a la contaminación ambiental y sonora y tendremos una enorme vía que favorecerá, indebidamente, a muy pocos automovilistas.

Lo más grave del asunto es que las autoridades distritales, los Concejos Municipales de los distritos involucrados y, sobre todo, el Alcalde Metropolitano no han dicho nada. Su silencio es señal de incapacidad manifiesta y, si hubiera justicia en el país, deberíamos denunciarlos por complicidad en este absurdo CRÍMEN ECOLÓGICO

Sigo sin entender por qué es que las autoridades ministeriales, en este caso la de transportes, siguen sentándose en las cabezas de las autoridades locales. tal como lo hace la de vivienda, con esa gran estafa Ciudadana que constituyen las viviendas de interés social. Y lo hacen con total impunidad y, al parecer, bastante éxito.

Como Municipalista y Ciudadano de a pie, invoco al señor alcalde metropolitano, Rafael López Aliaga, a manifestarse al respecto. Lamento que, en este caso, haya renunciado al parecer, a su atribución constitucional expresa de decidir, en forma exclusiva, sobre la Planificación Urbana, que incluye el Transporte y Movilidad. de toda Lima Metropolitana.


viernes, 18 de abril de 2025

CHICLAYO, Chiclayanidad y Calidad de Vida.

Hoy día, 18 de Abril, nuestra amada ciudad de CHICLAYO cumple 190 años de Creación. Bastantes años que deberían haber marcado nuestra madurez como Ciudad/Ciudadanos, pero no ha sido así. Estamos mal, hemos llegado a un punto irreconciliable entre nuestros deseos, nuestros intereses y nuestra realidad. Pero, qué nos pasó? Teníamos todo para ser la vedette citadina de la costa peruana, incluso de América del Sur.  Pero, hoy nos encontramos con una ciudad inhabitable, casi como la habitación de la casa que da vergüenza mostrar cuando se reciben visitas, digamos turistas extranjeros, que podrían y deberían haber sido nuestro aliciente y fuente de financiación para tener una de las mejores ciudades de esta parte del mundo.

Vamos a ver, tenemos la mayor concentración de restos arqueológicos que, a despecho de nuestra actual situación, nos muestran como la Civilización más antigua y desarrollada del país. Tenemos la suma de los mejores micro climas nacionales, tenemos una tierra agrícola maravillosa y una producción  agro industrial de nivel de exportación, tenemos una riqueza gastronómica que ya quisieran tener nuestras ciudades vecinas. Tenemos gente de la buena, de esa que trabaja de verdad y que se empina sobre sus carencias y triunfa, pero económicamente, personalmente, hasta socialmente, pero no tenemos lo principal: VERDADERO AMOR POR NUESTRA CIUDAD, CARECEMOS DE IDENTIDAD CIUDADANA,  DE LA CHICLAYANIDAD necesaria para ordenarnos, organizarnos, planificar juntos y meter pie a fondo en nuestros objetivos comunes. Y eso nos ha pasado porque somos una Sociedad Enferma, llena de odios, de complejos, de problemas irresueltos, que nos hacen daño internamente y no nos permiten convivir en paz, con actitud inteligente, generosa y respetuosa de los demás, que aunque son diferentes a nosotros, son nuestros HERMANOS CHICLAYANOS, constituyen nuestra familia grande, aquella con la que convivimos y con la que podríamos alcanzar la estratósfera en Calidad de Vida si pudiéramos ponernos de acuerdo entre todos. Y eso incluye a los que viven aquí todavía, los que han salido pero aquí dejaron su corazón y hermosos vínculos e incluso, los que han llegado de afuera para labrarse un futuro porque creyeron que Chiclayo era un sueño hecho realidad. Ya lo hemos dicho varias veces y hoy, que estamos de Aniversario, debemos ponerlo nuevamente sobre la mesa, CHICLAYO está así porque lo hemos permitido, por acción o por omisión, por cometer errores, por no querer participar en la solución de sus problemas y por creer que sólo nosotros, tenemos la razón.

Frases como: BOTEN A LOS SERRANOS, VAQUEN A LA ALCALDESA, MATEN A LOS EXTRANJEROS, no sólo no resuelven nada, sólo siguen alimentando ese sentimiento de furia interna que bien empleado, podría ser el maravilloso MOTOR Y MOTIVO DE LA CHICLAYANIDAD.

Una Ciudad en la que sus Ciudadanos no preguntan, no fiscalizan, no participan, no es una Ciudad. Una Ciudad en la que sus Ciudadanos no asumen el Cogobierno Municipal no sirve, no se desarrolla. Una Ciudad en la que todos creen que sus autoridades son los únicos responsables de lo que en ella sucede es una Ciudad condenada al fracaso total. Una Ciudad en la que sus Ciudadanos no conocen su historia, no aman su pasado, no se reúnen para hablar de su futuro, es una Ciudad condenada a desaparecer.

Entonces, qué hacemos? Primero, pensar, analizar y aceptar que estamos mal. Luego establecer una hoja de ruta personal, familiar, comunitaria. Queremos Vivir Mejor, casi decentemente? Queremos estar orgullosos de nuestra amada Ciudad de Chiclayo? Queremos ser reconocidos como la mejor Ciudad del país y no sólo la ciudad en donde mejor te puedes emborrachar? Queremos seguir siendo el furgón de cola de todo gobierno que como nos ve desunidos, tristes y cabizbajos y no nos considera a la hora de la repartición del presupuesto nacional? Queremos que nuestros descendientes reciban un maravilloso lugar para vivir y seguir desarrollándose? Bueno, entonces, miremos dentro de nosotros mismos. Ya no vale buscar justificaciones, ni culpables, o razones mil que nos hagan sentir bien pero que no mejoran la situación de nuestro Chiclayo. Ya es hora de actuar.

Tenemos muy cerca las Elecciones Municipales de Octubre 2026, por qué no empezamos por ponernos serios y tomar la decisión de elegir a las nuevas autoridades con inteligencia pero con la actitud de conocer a fondo la capacidad e intenciones verdaderas de todos los candidatos, desechando a los partidos políticos y sus agendas particulares y eligiendo al MEJOR EQUIPO? Porque no se necesitan líderes mesiánicos, ni políticos en busca de escaleras de ascenso; se necesitan, repito, los mejores equipos para transformar a CHICLAYO. Pero debemos tener presente, en todo momento, que debemos poner el hombro, TODOS, antes, durante y después de cada nueva Administración. Las autoridades roban o se equivocan cuando están solos, cuando saben que pueden actuar a su antojadiza gana y cuando sienten que a nadie le importa. 

Hay algo que casi nunca escucho decir, Chiclayo es una Municipalidad Provincial que cuenta con 20 distritos, que deberían tener un solo GRAN PROYECTO INTEGRAL DE DESARROLLO URBANO, en coincidencia además, con los planes desarrollo de las otras dos provincias, que son Lambayeque y Ferreñafe, que aglomeran 18 distritos más. Si no trabajamos con la totalidad de los distritos vecinos y nos ponemos de acuerdo para trabajar por ese necesario Plan Global, seguiremos perdiendo tiempo, dinero y las esperanzas de nuestros hermanos Chiclayanos. La política en el Perú y sus nefastos partidos nos han subdividido hasta atomizar nuestras visiones Ciudadanas para poder seguir lucrando con nuestras inmensas riquezas. Ya no lo permitamos más.

DEBATES DE PROGRAMAS DE GOBIERNO, en lugar de regalitos, abrazitos y besos. ANÁLISIS DE LAS HOJAS DE VIDA PERSONALES DE LOS CANDIDATOS, en lugar de toneladas de cartelones inservibles y pancartas ayayeras. Que es una excelente persona y muy generosa, que es un político renombrado, que nació y siempre ha vivido en Chiclayo. Sí todo ello está muy bien, pero está capacitado? Conoce los problemas de la Ciudad y sabe cómo solucionarlos? Y, sobre todo, tiene el mejor equipo de regidores y una lista tentativa de funcionarios de primer nivel?

Estamos a 10 años de celebrar el segundo centenario de nuestra partida de nacimiento, ya es tiempo de unirnos y empezar a trabajar por nosotros mismos. Se lo debemos a nuestros padres, se lo debemos a nuestros hijos. Un fuerte abrazo Hermanos Chiclayanos.

FELIZ ANIVERSARIO AMADA CIUDAD DE CHICLAYO.

lunes, 10 de marzo de 2025

Del Mercado Inmobiliario y la Burbuja Inmobiliaria en el Perú.

Los voceros de las constructoras e inmobiliarias, son rotundos al afirmar, que tenemos en el Perú un creciente DÉFICIT DE VIVIENDAS y que no existe ni existirá, una peligrosa BURBUJA INMOBILIARIA en el país. Basan lo anterior en la proclamación de la existencia de cerca de dos millones de familias que desean adquirir vivienda y en que jamás ha habido ni habrá especulación en el precio de venta de las viviendas, que son las principales causas para la gestación de una Burbuja Inmobiliaria y su proyectado estallido.

Bueno pues, ambas altisonantes afirmaciones parten de supuestos falsos. En el Perú no tenemos un DÉFICIT DE VIVIENDAS, entendiendo que Déficit es una "demanda insatisfecha". Eso equivaldría a decir que existen dos millones de familias peruanas que no habitan en una vivienda adecuada y que tienen el deseo, la necesidad y "la capacidad" para adquirirla y eso, es totalmente falso. Lo que tenemos en el país es un clamor de Ciudadanos que quisieran vivir dignamente, pero que no cuentan con la oportunidad ni los medios necesarios para adquirir una vivienda. Y eso no es Demanda. 

Lo segundo, afirmar que no hay especulación en los precios de venta de las unidades de vivienda construidas está muy lejos de la verdad. Hace poco más de 20 años, justo cuando el estado "decide intervenir" para solucionar "el déficit habitacional" con el establecimiento de subsidios que al parecer lo que en realidad buscaban, eran hacer más atractiva, accesible y segura la venta de viviendas, por parte de los inversionistas, se pone en marcha, por parte de los inversionistas inmobiliarios, una excelente estrategia de mercado. Para esas fechas una casa antigua de 250-400 m2 de área de terreno, ideal para la construcción de multifamiliares, tenía un precio de mercado de 60,000 - 75,000 dólares y en un lapso de pocos meses esas mismas casas ya se estaban ofertando y comprando a precios que fluctuaban entre 120,000 y 150,000 dólares. Qué paso? Pues se había implementado eso que podría llamarse una brillante estrategia de mercado. Si los precios de las viviendas individuales se hubieran mantenido en esos niveles, entonces el posible comprador hubiera tenido reparos en pagar por un nuevo departamento de edificio precios mayores a los de una casa independiente. Entonces, en una jugada maestra, se prefirió pagar el doble y alentar el alza ficticia de los precios de las casas unifamiliares para que pudieran estar al nivel de los precios de venta que ellos proyectaban a futuro para los nuevos departamentos. Cómo se explica esto? Cómo va a ser que un inversionista prefiriera pagar, por ejemplo, 120,000, en lugar de los 60,000 que realmente costaban los terrenos? Eso sería una locura. Aparentemente. Esos 60,000 adicionales eran un costo de inversión rápidamente recuperable, ya que al construir 40 departamentos y ponerlos a la venta ya no a precios de entre 55,000-60,000, sino a precios de entre 120,000-150,000, la diferencia favorable se multiplicaba por 40. A nadie le extrañarían esos precios tan altos porque todas las casas ya se estaban vendiendo a esos precios. Lo que ahora pasaba es que con la venta de un solo departamento ya se recuperaba la inversión de la compra de la casa antigua, probablemente con 14 departamentos más ya se estaba recuperando el monto de la inversión en diseño y construcción y todo el resto (25) era utilidad, descontando claro, las posibles coimas, extorsiones, repartijas e "imprevistos" que la mayoría de los edificios construidos en los últimos 25 años han tenido que considerar, probablemente, en su cálculo de costos totales. Aún así, un Negocio Redondo para cualquiera.

Al parecer, el estado a través del ejecutivo,  no habría dejado de intervenir en la emisión de normas y medidas que pudieran garantizar el éxito y la bonanza de los inversionistas inmobiliarios. En nombre de los sin techo propio, se han publicado una serie de decretos supremos, reglamentos y hasta leyes que buscaban intervenir incluso, en la Planificación Urbana de nuestras Ciudades, algo que ya detuvo el Tribunal Constitucional a través de una sentencia definitiva sobre la Competencia de Atribuciones para decidir y legislar sobre el Ordenamiento Territorial y el Desarrollo Integral de las Ciudades, negándole oficialmente al ministerio de vivienda el derecho que ese ente estatal se había arrogado y confirmando dicha Atribución como exclusiva de las Municipalidades Provinciales. Pero han quedado las secuelas, lamentablemente con respaldo jurídico que convierte en una labor titánica controlarlas por parte de las municipalidades. Los despropósitos urbanísticos, como los Certificados de Parámetros indebidamente emitidos y hasta Licencias de obligatoria emisión por la participación de algunos malos revisores urbanos, son documentos que tienen amparo legal mínimo de 3 años, para llevarse a la construcción sí o sí; otra invención ministerial, la de los revisores urbanos, que le arrebató a las municipalidades, mediante la abolición de las Comisiones Municipales de Revisión de Proyectos, la potestad de emitir o denegar Licencias de Construcción.

Un dato oficial muy importante, que se omite presentar públicamente, es que contamos, sólo en Lima con 35,000 departamentos que se han acumulado en los últimos años sin poder ser vendidos, que entre inversionistas informales y otros, deben ser realmente 50,000. Se está produciendo un peligroso compás de espera por ambas partes. Por parte de los vendedores que esperan que las cosas se enfríen, se incremente la liquidez y puedan vender al mismo precio de antes o hasta un poquito más, para poder cubrir los intereses que vienen acumulándose por activos no vendidos que han sido financiados con préstamos bancarios y ellos no están decididos a perder todo y, por otra parte, los compradores que están esperando la caída total de los precios ante la desesperación de las constructoras. En el medio los bancos acreedores y los inversionistas de segundo piso que saben que no es negocio para ellos embargar propiedades sea a la constructora o a los compradores por falta de pago ambos, y tratar de sacarlos a la venta, cuando las cosas en el mercado inmobiliario están pintando de gris oscuro. Y eso, podría ser el posible estallido de una CRIOLLA BURBUJA INMOBILIARIA.

Estamos ante una evidente desinformación o la manipulación orquestada de la información que tiene como únicos y exclusivos clientes a quienes tienen los medios para pagar por ello. Por otro lado, el grave URBANICIDIO de la invención de las Vivienda de Interés Social, es un tema que amerita un mayor análisis y que tocaremos en otra oportunidad, pero que considero podría ser la más grande estafa a la Ciudad y a los Ciudadanos.

sábado, 18 de enero de 2025

FELIZ ANIVERSARIO MI LIMA QUERIDA

 Llegar a Lima, como extranjero con la ilusión de vivir mejor, sigue siendo una regla entre muchísimos sudamericanos, bastantes norteamericanos  y algunos europeos.

Llegar a Lima para desarrollarse profesionalmente y conseguir mejores oportunidades es una meta personal de casi todos los Peruanos de provincia.

Pero también, llegar a Lima para hacerse rico, de cualquier forma, es una norma para todos los desgraciados, entre delincuentes, políticos profesionales y  sinvergüenzas de cualquier parte del mundo, Perú y balnearios, incluido.

Dentro de 10 años llegaremos a ese hito maravilloso de los 500 años de edad (Fundación) de nuestra gran Ciudad y no sólo la acuciosa Mariana Alegre se pregunta, ¿CÓMO VAMOS? Sino que todos los Limeños de nacimiento y adopción nos hacemos la misma pregunta, aún sabiendo que la respuesta siempre será: Como lo esperábamos, como lo merecemos. O sea, hasta las callangas.

Lima tiene muchos enemigos, todos los conocemos y los dejamos hacer, cuando no los apañamos. Desde todos los invasores profesionales de terrenos estatales hasta algunos constructores inmobiliarios, que en ambos casos sólo buscan el beneficio particular, aprovechándose de las necesidades imperiosas de conseguir una vivienda digna por parte de una población desposeída que no tiene forma de conseguirla por su cuenta. Pasando, claro, por autoridades y funcionarios corruptos y corruptibles que miran para otro lado, mientras extienden la mano ágil para recibir la suya, sin pensar en el futuro de la ciudad. Y aquí hablamos de autoridades congresales, ministeriales y municipales, metropolitanas y distritales. Sí pues, nadie se salva, por comisión u omisión, los señalo como culpables.

Pero el culpable principal es el propio ciudadano, ese hipócrita que exige de los demás un voto consciente a la hora de elegir, pero que no duda en darle el suyo al peor candidato pero que es su amigo, su causa, su socio. Ese ciudadano hipócrita e inmoral que exige se cumplan sus Derechos Urbanos, pero que se zurra en los derechos de sus vecinos, actuando como si la ciudad le perteneciera sólo a él y a su familia, mascotas incluidas.

Pero, oiga usted, ¿es que acaso todo está mal en nuestra gran Lima? Pues no, gracias a Dios. Existen, todavía,  LIMEÑOS que desean lo mejor para su ciudad, que quisieran verla como la capital de América, que sueñan con vivir decentemente, que hacen algunos esfuerzos para lograrlo, pero que, lamentablemente, al chocarse con el primer obstáculo, reculan y se vuelven a sus cuarteles de invierno a seguir rumiando su rabia. Y ESO ESTÁ MAL.

Podemos entender al delincuente, al incapaz, al corrupto y hasta podemos disculparlos porque no les queda de otra, porque ya están podridos, pero lo que no podemos perdonar es a quienes se dan cuenta de lo que está pasando, saben lo que se podría hacer para mejorar las cosas, tienen la capacidad para hacerlo pero les apesta lo que ven y no opinan, no aparecen, no participan. Creo que ESO NO ES CORRECTO.

Vamos a ver, un fuerte grupo de Limeños apostamos por nuestro actual alcalde, Rafael López Aliaga, pero el auto denominado Porky se desvaneció entre los problemas urbanos, se achicó ante el vendaval de reclamos y los buitres de toda laya. El señor López Aliaga podría haber hecho mucho más, pero prefirió lo notorio antes que lo importante. No ha atacado los verdaderos problemas, no ha resuelto lo que consideró demasiado grande, prefirió el efectismo y lo decorativo. No ha empezado lo que sabe que no va a terminar y no ha ejecutado proyectos, que estaban listos y eran excelentes, pero que no eran de su cercanía y hermandad, al menos, ESO ES LO QUE PARECE.

Se dice que un alcalde no debería ser un empresario, porque no tiene la menor idea del tema social, yo discrepo de ello. Un buen Empresario, sabe que en una empresa que se respeta, su mayor activo es el Capital Humano, las personas; y por ello es que las mejores ideas, proyectos y acciones de ese líder deberían ser en favor de esas personas, es decir, de los CIUDADANOS.

Pero en estos últimos años no ha sido así. Una Ciudad, que por ubicación, clima y conectividad debería ser la Gran Capital se ha ido hundiendo en un verdadero CAOS URBANO. Sí, las gestiones anteriores han sido funestas, pero precisamente por ello, ¿no hubiera sido más fácil, enmendar rumbos y empezar a hacer las cosas como es debido?

Nuestra hermosa LIMA ha sido muchas Ciudades, desde LA CIUDAD DE LOS REYES (Francisco Pizarro dijo), LA CIUDAD HORRIBLE (Sebastián Salazar Bondy afirmó), LA CIUDAD DE LOS PERROS (Mario Vargas Llosa sugirió), LA CIUDAD DE LOS REYES, DE LOS CHÁVEZ, DE LOS QUISPE (Rolando Arellano insinuó), LA CIUDAD DE LOS GALLINAZOS SIN PLUMAS (Julio Ramón Ribeyro explicó) y, ahora sin duda, LA CIUDAD DE LOS BUITRES (la realidad nos confirmó); pero en esa debacle urbana y a despecho de sus problemas, Lima sigue siendo maravillosamente tuya, mía, nuestra, por miles de cosas, vivencias y hasta problemas, porque en el fondo sabemos que esta mala racha pronto ha de terminar.

Y si, en un arranque de locura, el señor alcalde López Aliaga, se decidiera a reivindicarse en esta segunda parte de su administración, ¿ya que todavía le faltan dos años para culminar su período? Haciendo, digamos, lo que debió hacer desde el principio:  Involucrar a toda la Ciudadanía en la Gestión Municipal, convocar a la Asamblea Metropolitana de Alcaldes, de la conurbación Lima-Callao, para trabajar juntos en un solo Proyecto Urbano, hacer gala de una transparencia inédita y trabajar con la Ciudadanía organizada en el PROYECTO INTEGRAL DE DESARROLLO DE LA GRAN LIMA, que incluyera un proyecto de ley para desaparecer las 50 municipalidades de Lima-Callao y organizar una sola ALCALDÍA MAYOR que asegurara el desarrollo consensuado y coordinado, armónico y sustentable de toda la gran Lima, con un horizonte de 50 años. Suena como trabajo de titanes, verdad? Sin embargo, el momento álgido en que se encuentra nuestra ciudad capital es, probablemente, el mejor momento para empezar de nuevo, desde cero.

Podríamos rajar hasta el infinito del señor alcalde metropolitano, podríamos exigir su vacancia, podríamos sugerir que lo metan al cilindro o que lo conviertan en salame, pero Lima, nuestra Ciudad, no ganaría nada con ello. Por qué, más bien, ¿no trabajamos con lo que hay en el momento actual y nos ponemos de acuerdo en la agenda y el derrotero para los siguientes dos años?

Vamos a ver, señor Rafael López Aliaga, alcalde de la Ciudad de Lima, levante usted la mano derecha y con la mano izquierda en el corazón, repita: JURO POR DIOS, POR LA VIRGEN MARÍA, SAN JOSEMARIA ESCRIVÁ Y POR LA CIUDAD DE LIMA,  que ya entendí y voy a cerrar con broche de oro la Administración que me tocó presidir.

Y eso pasa por recolectar información fidedigna a lo largo y ancho de la gran Lima, diseñar un maravilloso pero sustentable PLAN URBANO y empezar a sentar sus bases para los próximos 50 años. ¿Es mucho pedir? No creo, es lo menos que podemos exigir por los 490 años de NUESTRA LIMA QUERIDA.

jueves, 4 de abril de 2024

LA COSTA VERDE: DE UNA AUTORIDAD METROPOLITANA A UN VERTEDERO DE LA CORRUPCIÓN?

 Un excelente informe del programa dominical Panorama puso al tanto a los vecinos de Magdalena del Mar y San Miguel, en Lima, de lo que ha estado sucediendo en los últimos meses al borde de su litoral. Centenares de volquetes han estado descargando miles de metros cúbicos de material proveniente de excavaciones y demoliciones realizadas por las inmobiliarias que operan en varios distritos de Lima. 

Un funcionario de la Municipalidad  de Magdalena del Mar, dice que no se cobra ni un centavo a las empresas que arrojan dicho material, que eso es una donación, habida cuenta que se necesita recuperar lo que el mar se ha llevado durante los últimos años de su borde costero y que gracias a esas generosas empresas se está avanzando en ganarle, nuevamente, la playa al mar. Pero la realidad es otra. Se aprecia en el video, que hay una persona con chaleco oficial de la municipalidad, que “administra” el pase y descarga de los volquetes, verificando rigurosamente, con el número de las placas de los vehículos que llegan, si ya hicieron el abono previo respectivo. Es decir, existe una organización que indica a qué cuenta bancaria transferir el pago de 50 soles por cada camión y que verifica los números de placas de los vehículos que pueden pasar el control y hacer la descarga respectiva. 

El encargado, dice que la Municipalidad no es la que cobra y que tampoco recibe dinero alguno y que por tanto ella no emite comprobantes de pago. Se sobre entiende, entonces, que la Municipalidad de Magdalena del Mar tiene un convenio con ellos y que, por eso, “no va a venir a molestar”. El señor alcalde, por su parte, ha declarado que ese chaleco municipal que usa el señor controlador como se aprecia en el informe periodístico, es de los usados en la gestión anterior, como afirmando que ese “negocio” se inició antes del año 2023, cuando él no estaba, pero no explica, cómo es que 15 meses después, el tiempo transcurrido con esta nueva administración, ese señor controlador, sigue allí sentado, haciendo el mismo negocio. Ese señor, según lo que dice el señor alcalde, debe ser un estafador, aunque lamentablemente, sigue actuando,  a vista y paciencia de las autoridades locales, incluida nuestra PNP, la Marina del Perú y la Fiscalía de la Nación. 

Y aquí cabe señalar dos cosas. Si fuera una generosa donación de material excedente de las constructoras, cuál es el número del Acuerdo de Concejo Municipal que ha aprobado dicha donación? Habida cuenta que la Ley Orgánica de Municipalidades, Ley 27972, en su artículo 9º, es muy clara al respecto. Toda donación debe ser aprobada mediante un procedimiento establecido, es decir, ninguna autoridad o funcionario municipal puede recibir donaciones, que no tengan el visto bueno de la primera verdadera autoridad distrital, o sea, el Concejo Municipal de Regidores; procedimiento muy necesario para evitar clientelismos, favores especiales de ida y vuelta o acuerdos bajo la mesa. 

Y lo otro, lo más importante, ese material, que se suponía debería ser sólo tierra y canto rodado, en realidad incluye peligroso desmonte, fierro oxidado y ladrillo, entre otros, y que al ser colocado (arrojado) sin contar con  procedimiento constructivo alguno de sujeción, va a ser barrido por el mar, contaminando gravemente sus aguas, las del distrito y de los distritos vecinos, además de alterar la morfología del litoral, generando oleajes indebidos en playas aledañas. Dice el representante de la Marina, que la Municipalidad de Magdalena del Mar ha recibido una autorización temporal, de 60 días para “el reforzamiento” de su borde costero y que ellos están esperando, imagino que sentados, de parte de la Municipalidad, su “Plan de Trabajo y la documentación (técnica) correspondiente”. 

La verdad es que este asunto ya había sido  denunciado en redes en el mes de Agosto del año pasado por el presidente de una junta vecinal, es decir, hace 8 meses, 240 días, con abundantes fotografías y videos de caravanas de pesados volquetes transitando ilegal y peligrosamente por las calles del distrito de Magdalena del Mar y el Circuito de Playas para ingresar por una “puerta” municipal; pero ni la autoridad local ni la policía se dieron por aludidas y la mayoría de los medios de comunicación miraron para otro lado. Lo curioso es que al día siguiente de emitido este reportaje de Panorama, cesaron por completo, las caravanas de volquetes en el distrito. Recién se daban cuenta, las autoridades locales, que eso estaba mal? Imaginamos que con esta denuncia pública televisiva, la Fiscalía de la Nación y la Marina, ahora sí, ordenaran una investigación a fondo para determinar quién es el “verdadero dueño de este gran negocio”.

El caso de la Municipalidad de San Miguel, también llama mucho la atención, el vocero oficial dice que “no sabía” que en plena zona de playa existe una zaranda y una chancadora, que recibe, trabaja y vende material a terceros; que sí cobran 65 soles por volquete, 30 % más que en Magdalena del Mar, pero que otorgan los recibos correspondientes. Bueno, al menos, ese dinero no va a ajenos bolsillos, sino a la Caja Municipal de San Miguel.

Por otro lado, en la misma franja de la Costa Verde de Magdalena del Mar, una empresa de Paratrikes, que son los gráciles y alados Parapentes, pero con ruidoso e infernal motor, sigue haciendo despegar y aterrizar en el distrito, a pesar de las múltiples denuncias y reclamos de los vecinos que residen en las viviendas junto al acantilado Magdalenense, que están hartos de que durante 12 o más horas al día, escuchen y sientan como que se está derrumbando el acantilado. Y sí, ese negocio se inició con el anterior alcalde, pero continúa hasta la fecha. A pesar que la autoridad ministerial que debería brindar la respectiva autorización afirma que está prohibido el cobrar a terceros, por la realización de ese “deporte” y que no ha emitido la autorización correspondiente de funcionamiento. Y, entonces, cómo es que se sigue realizando esa actividad comercial?

Finalmente, la Municipalidad de Magdalena del Mar ha perdido legalmente, ante una empresa que recibió en concesión la administración de canchas deportivas habilitadas sobre la Costa Verde para beneficio de los vecinos del distrito y que ahora tienen que seguir pagando para poder hacer uso de dichas canchas.

Cabe, entonces, la pregunta: No existe la Autoridad del Proyecto Costa Verde?, la que se supone, determinaría el uso adecuado y público de todo lo que existiera y se habilitara sobre su superficie, desde Chorrillos hasta la Punta en el Callao, para beneficio de toda la población de la gran Lima? No existe la Asamblea Metropolitana de Alcaldes, que debería coordinar y, en el mejor de los casos, ejecutar mancomunadamente  proyectos y obras en beneficio de todos los limeños? Bueno pues, pareciera que nada de eso existe. En la realidad, cada alcalde distrital se conduce de acuerdo a su propio parecer y entender. No se puede añadir…. De acuerdo a su beneficio particular.... porque eso lo determinarán las investigaciones pertinentes. Lo que sería bueno se hiciera de inmediato, para evitar las dudas y malas conjeturas que manchan indebidamente las honras de los involucrados: autoridades, funcionarios y empleados municipales.

miércoles, 21 de junio de 2023

La Autoridad Municipal y las Empresas Prestadoras de los Servicios Públicos.

No se puede entender el por qué la autoridad Municipal no asume la defensa de sus vecinos respecto de la calidad de la prestación de los servicios públicos, agua, alcantarillado e iluminación, que brindan las empresas autorizadas para hacerlo. Vamos a ver, en la LEY ORGÁNICA DE MUNICIPALIDADES (27972), se establece claramente, en su artículo X, referido a la PROMOCIÓN DEL DESARROLLO INTEGRAL que:  

"Los gobiernos locales promueven el desarrollo integral, para viabilizar el crecimiento económico, la justicia social y la sostenibilidad ambiental. La promoción del desarrollo local es permanente e integral. Las municipalidades provinciales y distritales promueven el desarrollo local, en coordinación y asociación con los niveles de gobierno regional y nacional, con el objeto de facilitar la competitividad local y propiciar las mejores condiciones de vida de su población". O sea, la correcta prestación de los servicios básicos de agua, alcantarillado y alumbrado público TAMBIÉN son responsabilidad de la autoridad y sus funcionarios, siendo la fiscalización de dichos servicios, atribución y obligación de estos últimos, tal como lo indican sus propias herramientas de gestión, como son el Reglamento de Organización y Funciones (ROF) y el Manual de Organización y Funciones (MOF), en donde se señalan a las áreas funcionales que deberían velar por la buena prestación de los servicios básicos. 

Si bien es cierto, las propias municipalidades no tienen capacidad sancionadora sobre las empresas prestadoras del servicio, sea Enel o Luz del Sur en el caso de Lima, sí pueden y deberían hacerlo, enviar, ante una notoria deficiencia o interrupción del servicio, un oficio conminativo a dicha empresa y copia del cargo con la denuncia respectiva a Osinergmin, el ente regulador nacional, para que proceda a emitir la sanción que corresponda. Tenemos en vigencia Leyes y Decretos Supremos, como el 020-97-EM, que señalan, reglamentan y sancionan las obligaciones no cumplidas por las empresas prestadoras del servicio de alumbrado público, que no solo obligarán a la restitución inmediato del servicio, cuando éste falte, sino que además supervisarán el descuento respectivo, en el siguiente recibo de energía, por el servicio no prestado por el tiempo determinado, en el rubro Alumbrado Público. Si la autoridad municipal no interviene es porque desconoce sus  atribuciones, obligaciones y compromisos para con su comunidad, o simplemente, porque no le da la gana.

Las empresas prestadoras de servicios eléctricos también están obligadas a cubrir la demanda del servicio de alumbrado público, en la cantidad y calidad requeridas, que brinden la seguridad necesaria de las calles de la ciudad, en cuanto al número de las lámparas en uso, a la altura conveniente de las mismas, considerando árboles y obstáculos existentes y con la potencia necesaria. Pero, se ha realizado alguna vez, alguna revisión exhaustiva, por parte de la autoridad municipal, con el levantamiento de información y opiniones de los propios residentes, si el servicio de alumbrado público es suficiente y adecuado? ¿No? Bueno, pues deberían hacerlo.

Por otro lado, las obras de ampliación de redes y de servicios nuevos deberían estar sujetos, como la lógica y la norma lo imponen, a verdaderos criterios de factibilidad, es decir, si alguna empresa inmobiliaria, por ejemplo, pretende construir 120 nuevos departamentos, debería solicitar la factibilidad real para 120 nuevos servicios de energía eléctrica requeridos y las empresas prestadoras deberían responder con la certeza y responsabilidad necesarias, si están en capacidad de atender a esa nueva carga solicitada, en la seguridad de que cuentan con las facilidades para ello, sin perjudicar a los servicios ya existentes en una zona determinada. Las caídas de tensión, producto de las sobre cargas, malogran indefectiblemente nuestros artefactos electro domésticos y producen los indeseables apagones que causan serios problemas a nuestro diario vivir. ¿Algún funcionario municipal ha emitido un informe de situación o diagnóstico sobre la carga instalada y su proyección necesaria para el crecimiento inmobiliario actual? ¿No? Pues debería, porque esa es su responsabilidad.

Finalmente, la infraestructura urbana de la ciudad, debería mantenerse en un excelente nivel, pero es continuamente deteriorada física y visualmente por las nuevas instalaciones o sus reparaciones, además de la proliferación de cableados innecesarios y el incorrecto mantenimiento de los mismos y, aparentemente, tampoco hay sanción por ello.

La omisión de funciones por parte de la mayoría de los funcionarios que deberían ocuparse de este asunto es evidente, pero no se emiten las respectivas sanciones administrativas aunque sí les cabe responsabilidad; además, la autoridad municipal en su más alto nivel, el Concejo Municipal, se hace el desentendido y no sabe, no opina, al respecto. Sí pues, existen muchos derechos ciudadanos que desconocemos, muchas responsabilidades funcionales ausentes y demasiados culpables, que están pasando desapercibidos. 

Reitero que la CALIDAD DE VIDA de nosotros, los Ciudadanos, es un derecho que debemos aprender a defender.




jueves, 8 de junio de 2023

¿Cómo les va a las nuevas autoridades Municipales?

A casi 6 meses cumplidos, para un período de 4 años de administración municipal, la respuesta tendría que ser, MAL, PERO MUY MAL. Salvo honrosas excepciones y chispazos de buen proceder, las más de 1,800 municipalidades del país se encuentran en el limbo. Entre algunas autoridades que no saben por dónde comenzar, porque nunca tuvieron claro de que se trataba eso de LA GESTIÓN MUNICIPAL o porque todavía no encuentran la forma clara y precisa de cargarse los presupuestos, que para eso postularon y las otras, que ya empezaron a despacharse las partidas presupuestarias a su regalada y antojadiza gana, nuestras Ciudades y Comunidades Urbanas, se encuentran sumidas en la inercia o total abandono.

Vamos a ver, empecemos por reconocer que el proceso electoral municipal es un chiste, postula quien sea, como sea y con la plata del que sea. Que se traduce en que el nulo conocimiento y la poca capacidad, terminan asociándose con auspiciadores angurrientos, que luego reclamarán "su inversión", a la buena o a la mala. Pasamos luego a la votación ciudadana, que es tan graciosa como irracional: Ese es bonito, Esa es sexi y ya está, tenemos ganador/a. Nadie, ni las autoridades electorales competentes ni los ciudadanos, exigen el debate, la presentación de propuestas serias, ni siquiera los antecedentes reales de los competidores y sus equipos de regidores y las elecciones, salvo otra vez las excepciones, terminan siendo más de lo mismo o peor que la anterior.

Se inicia la administración y los entrantes ni siquiera piden cuentas de lo recibido a la gestión anterior, o porque ellos mismos han sido los esperados para cubrir el mal proceder de los que salen o, en la necesidad de subsistir, se cubren para, tampoco, ser auditados cuando se retiren, en una clara práctica de, Entre gitanos no nos vamos a leer la suerte.

En las últimas décadas, la politiquería peruana y sus engendros, los partidos políticos,  se han repartido la torta municipal con malas prácticas, sucias maniobras y no pocas convenientes engrasadas a los supuestos regidores opositores, que entran como leones heridos y terminan como corderitos mimados, al servicio del ganador de turno, claro.

Pero, ¿es tan difícil exigir que postulen buenos candidatos y que se elijan solo a los mejores? Pues, no. Es sencillísimo. Claro, siempre y cuando exista la voluntad necesaria para ello. Sólo hay que ponernos serios y exigir el cambio de algunas cosas. Por ejemplo, por una razón absurda e inexplicable, puede postular a una alcaldía, cualquier ciudadano peruano, mayor de edad. Requisitos: Ser peruano con DNI, sin condena penitenciaria y vivir, o decir que vive por lo menos, dos años seguidos en la provincia y distrito por los que postula. Y ya está. No importa si no sabe sumar ni con los dedos o si es el más tramposo del barrio. Esos no son requisitos vociferará su jefe de campaña. De allí a aliarse con las empresas que tienen intereses a futuro, hay un paso y luego de 10 licitaciones o 20 licencias amañadas de por medio y ya saneada la deuda personal adquirida en campaña, lo que sigue es hacer caja para la jubilación anticipada del suertudo electo.

Y los señores ciudadanos, qué dicen? Al parecer, mayormente desconocen todo y luego, ya en el ejercicio del cargo del susodicho elegido, a los Ciudadanos solo les quedan dos opciones, callar y bajar la cabeza, mientras se reciben palmaditas en el hombro, lonchecitos de vez en cuando y condecoraciones inventadas o, convertirse en los malos de la película, los quejosos de siempre y los inconformes de toda la vida, como suelen llamarnos a los que no nos gusta quedarnos calladitos. 

Y sí pues, estamos mal y seguiremos peor, hasta que los propios Ciudadanos decidamos tomarnos en serio a nosotros mismos y nos hagamos responsables de nuestras Ciudades.

Por ahora, basta que entendamos que LOS ALCALDES Y LOS REGIDORES ELECTOS no son más que empleados temporales, contratados por un patrón que es EL CIUDADANO y que a cambio de un generoso sueldo o dieta, deberían inmolarse trabajando por la Comunidad a la que han jurado SERVIR. Sí pues, habrá qué pensar CÓMO HACEMOS PARA QUE ELLO SE CUMPLA.


martes, 27 de diciembre de 2022

Magdalena del Mar: cómo destruir una Ciudad en cuatro años.

El distrito de Magdalena del Mar, ubicado en la zona central urbana de Lima Metropolitana, con una población que supera los 70,000 habitantes y en constante crecimiento, amerita un estudio sociológico y urbanístico que pudiera brindarnos a futuro, las herramientas necesarias para evitar la destrucción paulatina de nuestras comunidades urbanas.

El caos urbanístico generalizado de este distrito se gesta en los últimos años de la década de los 90s, con la politización extrema de las elecciones municipales, la financiación de costosas campañas electorales que luego exigirían el retorno de la inversión realizada por parte de los “desinteresados promotores inmobiliarios”, los intereses económicos personales y de grupo, la desinstitucionalización municipalista y los visos de corrupción que se hicieron presentes en cada acto de gobierno municipal, cuando no, la apropiación ilícita de partidas presupuestales y una permanente y evidente malversación de fondos, todo ello, con la anuencia o indiferencia de los propios Magdalenenses, debido principalmente, a  que las pésimas administraciones sucesivas, habían sepultado la identidad ciudadana, el sentido de pertenencia y los valores cívicos, los pocos que quedaban de todos sus vecinos, cerrando un círculo vicioso que ha destruido totalmente al distrito.

Magdalena del Mar surge como una comunidad clase mediera de reconocida calidad de vida. Desde sus años previos de fundación, la nueva Magdalena era un deseable lugar para vivir, se construyeron residenciales casonas y el orden urbano, así como el principio de autoridad fueron sus pilares de desarrollo. Pero llegaron luego, la incapacidad como filosofía y la angurria como credo a instalarse cómodamente y entre aplausos del respetable, para convertirnos en un asentamiento inhumano en donde ya da vergüenza vivir. La administración que en pocos días culmina su período no puede ser catalogada como la peor de todos los tiempos, aunque lo merezca, sino como la ratificación de ese nefasto período de porfiada cuesta abajo que se inició hace más de 20 años.

Una impresentable administración ejercida por el señor alcalde Carlomagno Chacón, que valgan verdades no tenía la capacidad ni las ganas de gerenciar el distrito, pero que por esas cosas que tiene el pésimo sistema electoral municipal vigente, se encontró con la alcaldía gracias al voto de arrastre que el colorao Muñoz de su partido AP, le brindó en bandeja de plata. Pero el señor Chacón pudo haberse aplicado, pedir que le enseñen y tratar de hacer una aceptable gestión, pero hizo todo lo contrario. No se interesó, no se comprometió, ha estado cuatro años en modo muertito y ahora, se retira, con el aplauso de algunos cuantos incondicionales ayayeros pero el repudio total de una comunidad traicionada.

Desde el mes de enero 2019 en que el señor alcalde asumió su período como autoridad empezó con dos pies izquierdos. Como llegaba sin saber qué hacer no tuvo mejor idea que empezar ejecutando una obra, pistas y veredas del Jr. Cuzco, que con algunas presunciones de incorrecta licitación se había aprobado por la gestión anterior. El expediente estaba mal, los montos de inversión no se revisaron y la ejecución fue un dolor de cabeza para los vecinos. El señor Chacón había recibido, sin percatarse o tal vez sí, un peligroso presente griego de su antecesor, que durante 16 años continuos había sentado las bases del caos urbanístico, la sobre saturación del suelo urbano y la irresponsable permisividad constructiva que nos ha convertido en una bomba de tiempo en cuanto a la prestación de servicios básicos se refiere. En su momento y cuando había que señalar responsabilidades el señor Chacón se hizo de la vista gorda y cuando luego, pataletas de por medio, quiso puntualizar acusaciones ya era tarde, cuando la desaparición de pruebas y el auxilio legal e indebido de las prescripciones favoreció a su antecesor, por lo que ha tenido que cargar con el pasivo de esos 16 años previos de desgobierno municipal y desaparición de gruesas cantidades presupuestales.

El señor Chacón recibió un distrito sin un proyecto de desarrollo urbano integral y sostenido, que se explica porque su inexistencia permitió en su momento, la irregularidad en la emisión de licencias constructivas, el favorecimiento a ciertas empresas inmobiliarias y el caos que ahora nos ahoga. Pero en sus 4 años de administración no solucionó ninguno de los graves problemas heredados. No ha hecho siquiera, la convocatoria a la realización de un Plan de Desarrollo Urbano para el distrito, no evitó el grave riesgo de validación de certificados de parámetros urbanísticos, muchos de los cuales fueron indebidos y que se emitieron en gran cantidad antes de iniciar su administración y que han seguido exigiendo su validación y la consecuente emisión de licencias de construcción que jamás debieron darse. A ello debemos añadir la indiferencia para solucionar el problema de la invasión de un buen porcentaje del área propia del distrito por la municipalidad de San Isidro, otra fuente de recursos indebidos de la pésima administración anterior que no convenía arreglar, pero que en el caso del señor Chacón llama la atención porque aunque él afirma no haber sido testaferro ni socio en parte de esos negociados en la mal llamada zona en litigio, no se ha preocupado en demostrar que él está limpio de toda culpa, tratando de solucionar el grave y vergonzoso problema existente.

Pero en donde el señor alcalde, que ya está en sus descuentos, se ha lucido en nombre de la incapacidad supina, es en la torpe implementación de zonas de peatonalización y restricción del tráfico vehicular, sin un correcto análisis de situación y posibilidades, copiando burdamente y adoptando sin adaptar, estereotipos de realidades totalmente diferentes a la nuestra, que han causado graves perjuicios al comercio formal del distrito; a lo que se añade la entrega de toda la zona comercial, otrora importante cónclave de usuarios metropolitanos, desde La Molina al Callao, a los nuevos terroristas de la contaminación urbana, que al igual que en esas películas futuristas que muestran ciudades devastadas por  la violencia, la tortura psicológica que sufren los ciudadanos y la degradación de los espacios públicos, actúa con total impunidad ante la contemplación y apoyo de la autoridad, funcionarios y empleados municipales. Hordas de conductores de enormes triciclos motorizados, que están prohibidos de circular, han invadido el distrito de Magdalena del Mar, en donde se han apropiado de sus calles, de sus espacios públicos, de las pistas y veredas, premunidos de enormes altavoces, que durante 10, 12 y hasta 14 horas al día, de lunes a domingo, nos alteran y torturan con sus gritos destemplados, sus ridículas bromas de cómicos ambulantes, sus groserías y faltas de respeto a los vecinos, compitiendo entre sí para ver quién termina primero la venta de sus frutas y verduras de dudosa procedencia y estado de conservación. Las facilidades brindadas que permiten la impunidad de estos delincuentes urbanos, que atentan contra la tranquilidad pública, las normas establecidas, la salud física y psicológica de la población, no tiene explicación inteligente. Salvo que algún funcionario o la misma autoridad esté en contubernio con estos terroristas urbanos. Se plantea la posibilidad de la existencia de una mafia muy bien organizada que se dedica al negocio de comprar cosechas enteras, a precio de remate, a los agricultores de las zonas aledañas a Lima y cuyos productos son entregados a consignación a estas personas necesitadas de trabajo que tienen como condición, acabar como sea, en el día, la venta del producto recibido, aunque tengan que estar gritando hasta las 9:00 o 10:00 de la noche de cada día. Pero este negro negocio, que está exento de todo tipo de costo, salvo el pago a los vendedores cautivos, ya que no necesita de local ni de empleados, no paga servicios básicos, no requiere de licencia ni tampoco tributa municipalmente ni a la Sunat, necesita de la seguridad, impunidad en realidad, para poder “trabajar” libremente y allí entra a tallar la autoridad municipal. Existe una ordenanza Metropolitana que prohíbe, expresamente, el uso de megáfonos y alta voces por parte de los comerciantes informales, existe una eficiente Policía Nacional que está presta a colaborar en cualquier operativo que la autoridad pudiera planificar, pero nada de eso se usó, nada sirvió. Al igual que en el caso de los parapentes (paratrikes) la impunidad con la que sus promotores han actuado en el distrito es digna de una profunda investigación. Pero pareciera que a nadie le importa, ni a los medios de comunicación que han recibido las denuncias vecinales. Y la Fiscalía que ante las evidentes y abundantes pruebas debería haber actuado de oficio, siguen mirando con ojitos dormilones cómo estos gestores del sub desarrollo han destruido nuestro distrito.

El señor alcalde Chacón, es el responsable directo de lo que está sucediendo en Magdalena del Mar, una apacible comunidad en donde se vivía decentemente pero que se ha convertido en la nueva Parada de Lima, en donde las estrellas son los vociferantes y avezados vendedores de frutas y verduras. Y eso no es justo.

Y sí, bueno, valgan verdades, los vecinos del distrito jamás tuvimos representación entre los honorables miembros del Concejo de Regidores y si la justicia existiera también debería sentar en el banquillo de los acusados a quienes se beneficiaron de una dieta indebida durante estos nefastos cuatro años de desgobierno municipal.

domingo, 6 de noviembre de 2022

La propuesta Bruce y el desarrollo de nuestras ciudades.

El día de ayer, sábado 5 de Octubre 2022 se publicó, en un importante periódico de circulación nacional, un artículo del señor Carlos Bruce sobre el tema del desarrollo urbano sostenible y su propuesta de facilitarle tierras eriazas del estado, pero completamente urbanizadas, a las inmobiliarias para que puedan construir mega proyectos, valiéndose de curiosos decretos supremos que "promueven" la construcción de unidades de vivienda de interés social para que luego puedan ser vendidas a precios escandalosos. Según la propuesta Bruce, las inmobiliarias ya no tendrían que invertir en procurarse los servicios públicos básicos, sino recibir, como regalo del estado inmensos terrenos saneados y urbanizados, totalmente listos para construir. El señor Bruce, a pesar de las denuncias de aprovechamiento indebido de su cargo congresal para beneficio propio, debe ser una buena persona, pero su proceder no es imparcial y, definitivamente, no está del lado de los sin techo y, al parecer, no tiene el menor interés real en mejorarles sus condiciones de vida familiares. Desde su paso por el ministerio de vivienda se impusieron algunos decretos no solo permisivos sino lesivos al desarrollo armónico de nuestras ciudades. Cuando acompañó en la postulación presidencial a la señora Fujimori su caballito de batalla, tal vez para vender bien la candidatura entre los grupos económicos grandes, fue precisamente ésa: Ceder tierras de propiedad del estado en subastas "especiales" que favorecieran a las grandes inmobiliarias del país y que así pudieran ahorrase el costo tremendo de sanear y urbanizar terrenos, cargándose este costo al ahorro de todos los peruanos. Y éso no es justo. Se pretende replicar el mismo proceso de las irrigaciones nacionales que han sido un gran negocio para unos cuantos privilegiados. Los grandes proyectos de irrigación nacional han sido una gran cosa, es cierto, pero el estado invirtió enormes cantidades del presupuesto nacional en derivar ríos, canalizar sus aguas y conducirlas a grandes distancias y cuando ya las tierras tuvieron la seguridad del riego, se procedió a lo que se denominó la subasta de las tierras irrigadas, listas para ser sembradas. Eso podría haber sido maravilloso pero resulta que las subastas para colocar dichas tierras se hicieron totalmente amañadas, con evidente favorecimiento a las grandes empresas nacionales y extranjeras, que han podido hacerse de inmensas tierras de cultivo en las mejores zonas de Arequipa y de Olmos, para mencionar los casos reales. Ningún pequeño agricultor local pudo acceder a la compra de dichas tierras porque los macro lotes sacados a la venta, eran de miles de hectáreas que solo podrían haber pagado y así sucedió en la realidad, las grandes empresas, con dinero barato de las grandes entidades bancarias que usan el dinero de los pequeños ahorristas a los que pagan centavos de interés, para acumular grandes cantidades y tener acceso a esta feria de negocios grandes.  Sobre ese tema ya no se puede abundar porque ya pasó, está oleado y sacramentado y bueno pues, para qué lamentarse. Pero para quienes creemos que cosas similares no deberían suceder en el ámbito urbanístico nacional, podemos decir que existen infinidad de soluciones para abaratar vivienda, para poner al alcance de las personas de menos recursos, viviendas dignas, pero con el concurso de sus gobiernos locales y la capacidad de funcionarios de primer nivel. No podemos, no debemos, aceptar que despropósitos como el señalado, se sigan dando.

La incapacidad de las autoridades municipales para intervenir en el asunto ya no solo parece ser por ignorancia, raya mas bien en el contubernio y el interés económico personal. Alrededor de nuestras ciudades existen cordones de tierras eriazas del estado, que son indebidamente manejadas, a las que se accede por denuncios, es decir a un costo de cero soles y que luego son usadas para la expansión urbana de nuestras ciudades, cuyos propietarios, en algunos casos, se han visto beneficiados con el cambio de dirección de la expansión urbana previamente planificada, justo hacia las zonas donde esas tierras se encuentran ubicadas. A través del tiempo hemos visto crecer, no desarrollarse, nuestras ciudades hacia zonas insospechadas, que se convierten en depósitos de ahorro de grandes montos. Hay infinidad de casos en los que se adquirió a unos cuantos soles la hectárea (10,000 m2), para revenderse, gracias a su ubicación, a cientos de dólares el m2. A ello podemos añadir un recurso de esos grandes beneficiados que no por indebido no ha sido común en las décadas pasadas; para ahorrarse los costos de urbanización que podrían ser onerosos si de ampliar redes de los servicios básicos se trataba. Algunos "empresarios recursivos" se dieron cuenta que al poseer un bolsón de tierra ex eriaza o de cultivo y ahora reconocida como de expansión urbana, podrían beneficiarse usando a terceros para acceder a un costo menor de la expansión de los servicios básicos. En alguno que otro caso se propiciaron invasiones ilegales de cientos de familias que exigían a gritos, luego de poner su banderita y hacerse de tierras gratuitas para su vivienda, ubicadas digamos a 10 km del área cubierta por los servicios básicos, se les brinden los servicios de agua potable, alcantarillado y energía eléctrica. Una vez logrado dichos servicios las tierras ubicadas en zonas intermedias entre las zonas invadidas y el núcleo urbano existente, se vieron beneficiadas con que los servicios pasaban en frente y al costado de su ubicación y se ahorraban una buena cantidad de dinero al poder colgarse de esas redes. Como eso ya no es posible, porque ya las invasiones no se permiten, entonces ahora se buscan otras formas de beneficiar a las grandes inmobiliarias, que nunca la han sudado, nunca le han puesto el hombro a un adecuado desarrollo urbano de nuestras ciudades pero que siguen exigiendo y consiguiendo prebendas que les generen la mayor rentabilidad posible, probablemente con unos cuantos miles de dólares de comisión oficial. 

Muy bien, estamos planteando que ya no nos vean las caras, entonces qué hacemos para solucionar el problema de la falta de vivienda digna para los peruanos? Primero, los gobiernos locales tienen que asumir su función, fijada como responsabilidad en la Ley Orgánica de Municipalidades, de trabajar por el desarrollo pleno de los ciudadanos y sus familias. 

Necesitamos que los gobiernos locales asuman la administración directa de las tierras eriazas que posee el gobierno nacional y que está dispuesto a ceder para beneficio de la población. Realizar proyectos urbanísticos multifamiliares mediante asociaciones público privadas; contar con un banco de proyectos arquitectónicos y sus respectivos expedientes técnicos; con cajas de ahorro municipales que financien directamente y con tasas convenientes, dichos proyectos constructivos, que exista una oficina municipal técnica  dedicada a sanear las obras y apoyar en la inscripción de las mismas, además de propender a los proyectos municipales de vivienda de alquiler. Y es que no hay necesidad de pretender que todos los peruanos sean propietarios, mediante la adquisición de préstamos hipotecarios que  secuestren la vida total de los prestatarios, pagando intereses agiotistas a entidades financieras que tienen como objetivo real hacerse de las propiedades que los prestamistas dejen de pagar por la incierta estabilidad económica de la casi totalidad de familias peruanas. Lograr que las cosas cambien suena harto difícil, no? Si pues, pero es la única forma de alcanzar el correcto desarrollo de nuestras ciudades, mejorar la calidad de vida de nuestros ciudadanos y de brindar esa equidad tan necesaria para que nuestra sociedad no colapse de cuando en cuando, por esa odiosa y enorme brecha económica que existe y que se sigue expandiendo, entre peruanos y peruanos.

sábado, 1 de octubre de 2022

Magdalena del Mar: El mejor candidato, el peor alcalde.

Las elecciones Municipales tienen que replantearse desde su convocatoria, para poder asegurar una correcta elección, una verdadera representación y una buena Gestión. Los candidatos que se vienen presentando, al menos en Lima Metropolitana y sus distritos, nos dicen que algo estamos haciendo muy mal. Candidatos que se reinventan con nuevas promesas y mejores sonrisas, a los que ni siquiera se les debería haber permitido participar nuevamente, otros con hojas de vida impresentables y, la mayoría, haciendo gala de "desconocer mayormente" lo que implica la responsabilidad de una Gestión Municipal; pero allí están, muchos de ellos afilando sus largas uñas, preparando las licitaciones y contratos que luego entregarán al mejor postor, pero jurando que ahora sí se inmolarán en el nombre de su comunidad. 

En Magdalena del Mar tenemos a un candidato, de cuya honorabilidad no me puedo ocupar porque, personalmente no tengo pruebas en su contra y la justicia no parece tener muchas ganas de ocuparse del tema, pero sí puedo referirme por responsabilidad Ciudadana a su gestión pública, me preocupa que en 16 años de administración (4 períodos consecutivos) no solo no hizo nada realmente bueno por el distrito, sino que eliminó cualquier posibilidad de desarrollo integral de nuestra comunidad. Sí claro, maquillaje por aquí, parquecitos por allá, favorcitos especiales con nombre propio y mucho circo, ciertamente bullanguero y costoso, pero que destruyó el distrito con una permisividad, que no puedo llamar delictiva pero sí, apañadora e inconsecuente con lo que juró al asumir el cargo en cada uno de sus cuatro períodos, al permitir, avalar y sostener, el caos urbano que ya empezó a pasarnos las facturas de una irracional explotación del suelo urbano, un peligroso desborde poblacional y la consecuente saturación de las redes de servicios públicos, incompatible todo ello con una calidad de vida ciudadana de adecuado nivel y con el beneficio único y exclusivo de unas cuantas empresas inmobiliarias, que valgan verdades la única culpa que tienen en este caso, es el haber aprovechado las puertas y las ventanas que se les abrieron, indebidamente, de par en par.

En esos 16 años de su administración, pasamos a la cola de los distritos modernos de Lima central, recibimos el descarado avasallamiento de un distrito vecino que cada día avanza más en sus pretensiones de expropiarnos buena parte de nuestro territorio; perdimos, por otro lado,  valiosas oportunidades de crecimiento, cuyas verdaderas razones algún día saldrán a la luz. Se favorecieron zonas y sectores en busca del apoyo electoral permanente que nos han enfrentado unos contra otros y que han sido la causa real de la desaparición de nuestra Identidad Ciudadana, del respeto, el cariño y la defensa de lo nuestro. Candidato que ahora se vuelve a presentar rodeado de una costosísima y atractiva parafernalia, que se insinúa  como el redentor claro, luego de una gestión que pareciera realizada a propósito para renovarle simpatías y esperanzas a este candidato reincidente, por la pésima calidad de la misma y cuyos increíbles errores convierten cualesquier futura gestión en una maravilla.

El candidato al que me refiero ha acumulado una cantidad considerable de denuncias, hay un reguero de malos indicios en el manejo presupuestario municipal, la correcta administración y el despojo de derechos laborales, pero nada se ha probado fehacientemente y lo que llama profundamente la atención es que nadie ha presentado denuncias serias y fundamentadas que permitieran abrir una profunda investigación.

Nos preocupa, a los Magdalenenses libres de su influencia y sus favores, por ejemplo, que la desproporcionada campaña electoral realizada no haya despertado la curiosidad y la duda razonable de la comunidad y los organismos electorales y que luego tenga que ser "devuelta" con intereses. No es correcto el derroche realizado, no sí las intenciones son buenas; se contradice, en todo caso. con las reales posibilidades de un candidato normal. 

Ya todo está consumado, probablemente, y podría ser que nuestra comunidad Magdalenense vuelva a cometer el error de equivocarse, pero no quería, por cobardía o facilismo, dejar de emitir mi opinión, muy personal, sobre este asunto tan grave. Su nueva elección sería catastrófica. Sólo queda pedir que Dios nos ayude.

miércoles, 27 de julio de 2022

Construyendo nuestras Ciudades: Servicios, Equipamiento e Infraestructura Urbana.

Si bien es cierto, las Ciudades tienen como  fin único y excluyente al Ciudadano y su Desarrollo Integral, todo lo que acontece alrededor de dichos ciudadanos, su entorno más próximo y alejado, tiene que ver con unas condiciones satisfactorias de habitabilidad, que permitan y promuevan el desarrollo mencionado. Nuestro maravilloso hogar, nuestra casa bonita, pertenece a un barrio, a una comunidad de familias que requieren, en primer lugar de lo que llamamos servicios básicos: agua y alcantarillado, electricidad, internet, recolección y disposición de los  residuos sólidos, pero además, de vías peatonales para trasladarse, vías de transporte vehicular para ir un poco más allá, espacios públicos abiertos, áreas verdes, parques de recreación y, finalmente, lo que llamamos infraestructura para los servicios complementarios, como salud, educación, cultura y recreación, activa y pasiva y de comercio, entre otros.
Tenemos en el Perú condiciones mínimas de urbanización y habilitación urbana exigidas, que señalan todos los requerimientos antes mencionados, pero que muchas veces no se cumplen por la intervención de intereses muy particulares que anteponen lo personal a lo comunitario y cuya óptica, públicamente reconocida es la de "oportunidad de negocio".
Uno de los servicios básicos, municipales, el que constituye el recojo y disposición final de los residuos sólidos (basura) es el ejemplo claro de que estamos haciendo mal las cosas. Organizar y contratar dicho servicio a nivel provincial, por ejemplo, significaría un ahorro de no menos del 30 % en los montos de arbitrios municipales que el vecino paga mensualmente, pero se insiste en la onerosa contratación distrital, porque sí pues, porque cada alcalde distrital "tiene el derecho a llevarse alguito". 
El importante asunto del transporte, que debería ser en 80 % o más,  público y de buen nivel, responde en nuestras ciudades peruanas a no más del 20 % del total de viajes diarios de los ciudadanos, privilegiando el transporte privado, lo que ha causado la saturación de las vías existentes y de las que estén por habilitarse, además de haber convertido la ciudad entera en parqueo, cochera y hasta cementerio de los millones de autos existentes. Se han "diseñado", construido y puesto en deficiente servicio, una cantidad increíble de pasos a desnivel, de puentes que se desploman, de inmensas moles de escaleras que no se usan porque casi nadie puede subirlas con facilidad y prefiere cruzar a la carrera, sorteando autos y jugándose la vida, las avenidas de la ciudad. Tenemos, por otro lado, costosos monumentos a la imbecilidad, erigidos, para poner el nombre del alcalde, dejar un legado personal a la posteridad y llevarse una buena cantidad de dinero para la casa.

En el asunto de la recreación activa y pasiva, las áreas verdes, parques, jardines y bermas, estamos como tierra eriaza, en cero. Lo que muchos alcaldes invierten en plantitas, plantones y omnipresentes/horribles macetones equivaldría, probablemente, a la mantención de un excelente Campo de Marte, en cada distrito, pero otra vez, no se hacen las cosas que se deben, porque cuando se hacen las cosa debidas no hay alita para mí.

Pero, por el lado opuesto, cuando se diseña en tablero y se ordena por teléfono la construcción  o renovación de nuestras ciudades, las cosas tampoco funcionan. Lo que tenemos que hacer es planificar, diseñar, desarrollar e implementar proyectos de infraestructura urbana y de Equipamiento, adecuados, inclusivos, factibles, convenientemente supervisados y verdaderamente fiscalizados. Principalmente, porque todo lo que se construye tiene un costo, que sale de los bolsillos de los ciudadanos y porque desaparecerlo, cuando se comprueba el error, es casi imposible, además del roche inmenso. Entonces, ¿por qué se siguen haciendo?

Si sabemos, por ejemplo, que el auto particular contamina, entonces no necesitamos más vías, puentes a desnivel, tréboles ni nada parecido, necesitamos tomar la decisión de limitar su uso y propender a tener un transporte público de primer nivel, multimodal, con las unidades adecuadas, las rutas básicas y complementarias convenientemente planificadas, con los paraderos necesarios y bien implementados, en lugar de los cientos de rutas que atraviesan y saturan nuestras ciudades, mediante el uso de las combis asesinas, los buses vacíos o repletos, según la suerte que te toque y con "paraderos" a gusto del cliente y ánimo del conductor. 

Historias urbanas delictivas, como lo sucedido en el distrito de Magdalena del Mar, Lima, en donde la policía municipal golpeó brutalmente a vecinos que abrazados a los árboles no querían permitir que éstos fueran talados para aumentar un carril vehicular a una vía en zona residencial, por "la necesidad" de servir a un boom inmobiliario que exigía mayor ancho de vías para seguir aprobando proyectos de mega edificios que han convertido una bella zona residencial en una próxima Babel, no deben repetirse. Aunque fuera una maldad "quitarle" el negocio a quien se beneficia con licencias de construcción indebidas.

Se ha puesto de modo, últimamente, la peatonalización forzada de vías importantes de nuestras ciudades, porque sí pues, porque se ven bonitas, porque descontaminan y nosotros somos verdes; pero se han implementado a la mala, sin resolver el transporte público, sin contar con los parqueos necesarios para propios y foráneos y allí están, canchones sucios y repletos de macetones y "arte callejero" de dudosa calidad, además de la invasión asesina de motocicletas y bicicletas que, en la práctica, han sido los verdaderos beneficiarios de estos "inteligentes proyectos"; sin contar el tremendo perjuicio a las zonas comerciales, ya deprimidas y al borde del colapso.

Finalmente, los servicios complementarios, que no son poca cosa, no en comunidades con adecuado nivel de calidad de vida, no existen, no interesan, no "son rentables", mejor dicho.

Muy bien, pongámonos serios, nuestras ciudades están languideciendo porque no se están implementando proyectos adecuados e inteligentes, que den vida a las ciudades, que las renueven, que las pongan al día, que las hagan funcionales, lo que se está haciendo es hacer negocio con las necesidades de infraestructura y servicios urbanos. Todo se ha reducido a algo tan grotesco como real: ¿A cómo el macetón/la banquita/la papelera/el postecito de lámpara/, casero? Ya, quiero tantos de cada uno, me los dejas en la puerta de la municipalidad, me pasas la factura y YA SABES CÓMO ES.

Tenemos mucho por hacer, tenemos que acabar con estas iniquidades y recuperar nuestras ciudades, si es que queremos empezar a vivir decentemente. Y, la verdad, es tan sencillo de logarlo. Y, entonces,...... ¿cuándo empezamos?

viernes, 24 de junio de 2022

MASCOTAS ASESINAS - AUTORIDADES MUNICIPALES INERTES

Se ha producido recientemente, en Magdalena del Mar, el caso (reiterado) del feroz ataque de un perro pitbull a una vecina, se le destrozó la mano, su mascota personal recibió un feroz mordisco en el hocico y la autoridad municipal, a través de un miembro del serenazgo que presenció el hecho, se limitó a decir que sí pues, que ese perro era conocido por sus ataques, que vive en tal sitio, que pertenece a tal familia y ya está, se acabó la participación de la autoridad. La persona propietaria del can, corrió con los gastos de emergencia, se solidarizó con la persona atacada y ya está, se acabó el problema. El trauma sufrido por el animalito que fue mordido, ameritaba la intervención de los amantes de los animales, solicitando la máxima pena al agresor y el resarcimiento a su propietaria por las secuelas que dicho trauma dejará, pero no ha habido pronunciamiento alguno; por otro lado, el tremendo trauma de la señora que casi pierde una mano por la ferocidad del ataque, producido en el límite e interior de su propia vivienda y las secuelas del hecho: inhabilitación para trabajar  durante por los menos algunos meses, no han merecido el pronunciamiento de la municipalidad

Pero vamos a ver, este no es un caso aislado, no es la primera vez que se produce y, probablemente, tampoco será la última. Y, ¿eso está bien? Pues fíjense que no. En el Perú, desde el 22 de Noviembre del año 2001 tenemos vigente la Ley 27596, que REGULA EL REGISTRO JURÍDICO DE CANES y, desde el 21 de Junio del año 2002, tenemos el D.S. 006-2002-SA, que es el Reglamento formulado dentro de los alcances de la Ley Nº 27596 que regula el Régimen Jurídico de Canes, especialmente aquellos considerados potencialmente peligrosos, a fin de salvaguardar la integridad, tranquilidad y salud de las personas.

Además, en el artículo 10° de la mencionada Ley, se señalan las competencias municipales, provinciales y distritales, para llevar el registro integral de los canes domiciliados dentro de su territorio, con la obligación de indicar su característica de potencialmente peligroso, señalando los antecedentes de ataques y similares en los que hubiera incurrido. Y se señala la necesidad de coordinar entre la municipalidad provincial y las distritales, al respecto. Perdón, ¿qué es eso? Se refiere al trabajo, necesariamente informado y coordinado entre la autoridad provincial y las distritales, que en el país, no funciona y que mayormente se desconoce. Y, en el caso de Lima es grotesco, ya que en el período administrativo 2019-2022 el alcalde metropolitano y varios alcaldes distritales dicen pertenecer al mismo partido político, pero al parecer cada uno de ellos actúa como quiere y le conviene.

Pero, como si fuera poco, la mencionada ley conmina a las municipalidades para dictar las normas reglamentarias necesarias para su aplicación. O sea, cada municipalidad distrital debería tener su propia ordenanza al respecto o, en su defecto, ampararse y hacer cumplir la ordenanza metropolitana, que exista. Y, entonces, si esas ordenanzas existen, ¿por qué no se procede a la debida aplicación de las normas vigentes, a penalizar como se debe, a exigir resarcimiento como se debe?, en fin ¿por qué no se dispone que en esta ciudad nadie debería criar perros potencialmente peligrosos si antes no los registra, no obtiene la licencia respectiva, no declara que en la vivienda en donde habita el potencial asesino de 4 patas, todo está bien?, que, además, el propietario como lo exige la ley, cuenta con el Certificado o Constancia de Aptitud Psicológica que significa algo así como que demuestre que es capaz de criar, adiestrar, conservar y "pasear" a los animales potencialmente peligrosos y que, por tanto, carece de rasgos psicóticos que lo empujan a usar a sus fieros animales como armas letales en perjuicio de los demás. 

Finalmente y "según el Reglamento de la norma, los dueños de canes considerados peligrosos deben contratar un seguro de responsabilidad civil contra los daños que puedan ocasionar sus canes, como requisito para obtener su licencia de propiedad. La cobertura del seguro es de carácter anual y el beneficio es para cada víctima.
Según el Reglamento en su artículo 8, son considerados canes potencialmente peligrosos: la raza canina, híbrido o cruce de ella con cualquier otra raza del American Pitbull Terrier, además todos aquellos que han sido adiestrados para peleas o que hayan participado en ellas, los que tengan antecedentes de agresividad contra las personas, así como los híbridos o cruces de diferentes razas que no puedan asegurar su sociabilidad, temperamento o carácter, se incluye aquellos adiestrados para incrementar y reforzar su agresividad”.(APESEG)

O sea, todo está claro, todo está normado, todo tiene severas sanciones, pero nada se aplica y las autoridades distritales miran para otro lado ante estos feroces ataques, que Dios no lo quiera, algún día cobren la vida de alguna criatura indefensa, que juega desprevenida, en un parque, en la puerta de su vivienda o en los nuevos espacios públicos. 

La omisión de funciones, en las dependencias municipales es grave, pero la lenidad e indiferencia de quienes, como autoridades electas, han recibido el encargo de velar por una comunidad y su desarrollo, es inaceptable y en este caso concreto, es potencialmente criminal y también debería ser severamente penalizado.


lunes, 13 de junio de 2022

CONSTRUYENDO NUESTRAS CIUDADES - Los Ciudadanos.

Cuando habitamos una ciudad, sea porque allí nacimos o porque a ella llegamos, por necesidad o conveniencia, somos responsables, para adelante, de lo que en ella suceda incluyendo los errores o aciertos que se cometan.  Una ciudad, normalmente, existe desde antes de nuestra aparición y ya cuenta con marcos normativos, con poblaciones previamente existentes, con una infraestructura y equipamiento urbano determinados y con una historia que explica y avala dicha existencia. Entonces, no somos creadores del espacio que habitamos y su entorno, pero sí somos responsables de lo que será o en lo que se convertirá, en los próximos años y todo depende de nosotros mismos, LOS CIUDADANOS.

Nuestra ciudad, nuestra casa grande, debería llenar los requisitos de un buen lugar para vivir; que pueda brindarnos todas las posibilidades para alcanzar nuestro BIEN ESTAR, contando, entre otras cosas,  con un entorno amigable y que su infraestructura crezca y se desarrolle con nosotros, en base a nuestras expectativas, nuestros propios sueños de realización, pero y sobre todo, en la seguridad de que las personas, familias, que comparten su territorio conmigo, también comparten ideas similares sobre lo que es un lugar ideal para vivir. 

No es suficiente, entonces, que yo tenga "mi" casa propia, que cubra "mis" necesidades personales, familiares y que no me meta ni le cause problemas a nadie. Pues no, para VIVIR EN COMUNIDAD se necesita mucho más. Debo ser consciente de que no existo ni vivo solo, que así como exijo respeto para mi forma de vivir, excentricidades incluidas, también debo respetar a los demás y su peculiar forma de vivir, asegurándome de que TODOS nos sentimos bien, cediendo en algunas cosas, ratificando otras y exigiendo otras más. Así como todos tenemos derechos humanos universales que se exigen y se cumplen, también tenemos DERECHOS URBANOS, que surgen de una especie de PACTO DE CONVIVENCIA URBANA  tácito, que establecemos como patrón de comportamiento, basándonos no solo en la las leyes, la urbanidad, la moralidad y demás, sino en cosas intangibles, que habitan y podrían desarrollarse en nuestro sub consciente, como la IDENTIDAD CIUDADANA, el SENTIDO DE PERTENENCIA, la CULTURA CIUDADANA y la REPONSABILIDAD CIUDADANA, que se reduce a, por ejemplo: Sí pues, Soy CHICLAYANO, amo a mi ciudad, estoy orgulloso de ella y soy capaz de cualquier cosa por ella.    

No hay forma de alcanzar un BUEN NIVEL DE CALIDAD DE VIDA sino establecemos en forma conjunta, yo y los demás, los demás y yo, la idea clara de la manera en cómo queremos vivir, en qué queremos convertirnos, como comunidad y cómo queremos que sea vea y se aprecie nuestra ciudad. Tenemos que pensar entonces en organizarnos convenientemente, establecer normativas y planes, serios y factibles que garanticen que todo lo que hagamos estará siempre dirigido hacia el objetivo único y excluyente, de mejorar nuestra calidad de vida. Menos mal, que en el país ya existen estructuras ciudadanas básicas, que nos indican cómo proceder y qué es lo que tenemos que hacer para lograrlo. De nuestra capacidad y decisión depende revisar dichos procesos y fórmulas y mejorarlos, si cabe, para alcanzar nuestro objetivo.

Queda claro, entonces, que LA RAZÓN DE SER DE UNA CIUDAD ES EL CIUDADANO que toda su infraestructura y equipamiento urbano, además de los servicios básicos y complementarios, así como su ordenamiento y proyección futura, gira en torno a él y su familia. Y ¿cómo lo logramos? Teniendo las cosas claras, informándonos, opinando, debatiendo, exigiendo, si fuera necesario, que todo lo que se haga dentro y fuera de nuestras ciudades, sea para NUESTRO ÚNICO Y EXCLUSIVO BENEFICIO.

Tenemos DERECHOS, por supuesto, pero con ellos vienen nuestros deberes y responsabilidades. Al convivir con otras personas, con otras familias, necesitamos ordenarnos, necesitamos en primer lugar, ponernos de acuerdo hacia adónde queremos ir, cómo queremos vivir y qué tenemos que hacer para lograrlo. Eso se llama ORGANIZACIÓN. Ya hemos dejado atrás los clanes y las tribus, las cuevas y la ley del más fuerte. ahora necesitamos un ambiente de concordia, de paz, de armonía, de PONERNOS DE ACUERDO, Ya nos hemos organizado en territorios/municipios y tenemos instituciones que nos gobiernan, la más cercana a nosotros, la municipalidad y también tenemos definida la forma de elegir a nuestros gobernantes; pero sucede que un buen gobierno, una buena gestión municipal es, en un 60 %, producto de nuestra elección personal y la forma en que se conduzcan esas autoridades estará en proporción directa a la calidad y cantidad de nuestra PARTICIPACIÓN CIUDADANA. La calidad de nuestro entorno, los vecinos que tengamos, las normas que nos gobiernen y los proyectos a mediano y largo plazo, son también de nuestra entera responsabilidad. Los malos gobernantes, municipales, regionales y nacionales, no llegan al poder y a disponer de nuestros presupuestos y de nuestro propio futuro por obra de milagro, sino por nuestra elección consciente y razonada y se mantienen o reeligen, a pesar de ser incapaces o corruptos, por nuestra desidia e indiferencia.

Entonces, esas hermosas ciudades que sabemos que existen, pero bien lejos de nuestra realidad, no responden a un hechizo, a un acto de birlibirloque, sino a un arduo trabajo, conjunto, de los ciudadanos y sus representantes o gobernantes de turno.

Y ahora que ya sabes cómo funcionan las ciudades, quieres mejorar la tuya? Solo depende de ti y de tu decisión para lograr el cambio necesario.